Anécdotas de librera. Un encuentro infantil: «Tengo mi propio dinero y quiero comprarme un libro»
Tiene los puñitos de las manos apretados, la mirada ansiosa y la respiración contenida. Su pequeña carita va de un lado a otro de la mesa, sin pausa. Hola, ¿en qué puedo ayudarte? Pues… es que tengo mi propio dinero y quiero comprarme un libro.